lunes, 18 de mayo de 2009

Dispositivos al cubo: soberanía, disciplina y control

 

"Érase una vez un rey, en un país muy lejano, que exigía los productos cosechados a cambio de dejar vivir…"

 

Durante la edad media, los derechos de los hombres giran en torno al rey; si existe un derecho, es el derecho divino.  En las sociedades de soberanía se trata de recaudar la producción más que de organizarla, en tanto el poder recae sobre los bienes, la tierra y sus productos.

Así como el rey no organiza la producción, tampoco organiza la vida de los súbditos, sino que decide sobre su muerte. Esta relación asimétrica se ejerce de modo discontinuo; por ejemplo, a través de la recaudación de impuestos.

 

Primero la familia

Después la escuela: “acá ya no estás en tu casa”

Después el cuartel: “acá ya no estás en la escuela”

Después la fábrica

De tanto en tanto el hospital

Y eventualemente la prisión

Gilles Deleuze

 

Durante la edad moderna, en los siglos XVIII y XIX, predominan las sociedades disciplinarias que alcanzan su apogeo a principios del siglo XX. Su principal modo de operación es a través de la organización de grandes espacios de encierro. El individuo pasa de un espacio cerrado a otro, cada uno con sus leyes. El proyecto ideal de los lugares de encierro, particularmente visible en la fábrica, es concentrar, repartir en el espacio, ordenar en el tiempo, componer en el espacio-tiempo una fuerza productiva cuyo efecto debe ser superior a la suma de las fuerzas elementales.

A diferencia del dispositivo de soberanía, tiene por objetivo los cuerpos, mantiene con ellos una relación analítica. Su objetivo es aumentar la fuerza económica del cuerpo, reduciendo simultáneamente su fuerza política. Su resultado, en tanto dispositivo productor, es la generación de individualidad. Para ello, interviene de manera continua, regulando el conjunto de la vida social. Ya no se trata de “dejar vivir, hacer morir” sino de “hacer vivir, dejar morir”.

 

"Hoy, 200 millones de personas, usan Facebook diariamente…"

           

Las disciplinas entraron en crisis; a pesar de todas las reformas pretendidas para los lugares de encierro; los interiores perdieron vigencia, dando lugar a las sociedades de control. Ahora, el control opera al aire libre y de formas ultrarápidas. Se da a través de modulaciones , como  moldes autodeformantes que cambian continuamente. Por ejemplo, la empresa ha reemplazado a la fábrica: en ella, el salario se modula individualmente y se encuentra en estado de perpetua metaestabilidad.  Introduce una rivalidad entre sus miembros, a través de una motivación y meritocracia. El reflejo en la educación se ve en la formación permanente y la evaluación continua.

Si la modulación es individual a través de los méritos, como modos de control, la estabilidad deja paso a la metaestabilidad, como deformador universal.

“El lenguaje numérico del control está hecho de cifras, que marcan el acceso a la información, o el rechazo. Los individuos se han convertido en “ dividuos ”, y las masas, en muestras, datos, mercados o bancos.” El capitalismo no busca continuar el modelo industrialista sino, más bien, vender servicios y comprar acciones. Ya no es un modelo económico de la producción solamente sino que es dispersivo.

El control es a corto plazo, de rotación rápida, continuo e ilimitado. El marketing es uno de los instrumentos de control social actual.

 

“Es fácil hacer corresponder a cada sociedad distintos tipos de máquinas, no porque las máquinas sean determinantes sino porque expresan las formas sociales capaces de crearlas y utilizarlas. Las viejas sociedades de soberanía manejaban máquinas simples, palancas, poleas, relojes; pero las sociedades disciplinarias recientes se equipaban con máquinas energéticas, con el peligro pasivo de la entropía y el peligro activo del sabotaje; las sociedades de control operan sobre máquinas de tercer tipo, máquinas informáticas y ordenadores cuyo peligro pasivo es el ruido y el activo la piratería o la introducción de virus.”

 

¿Cuáles de las características de los distintos dispositivos creés que se encuentran en Facebook? ¿Relacionarías algún tipo de dispositivo con Facebook?

4 comentarios:

  1. Creo que la demonización de Facebook es más propia de un romanticismo asociado a la ciencia ficción de mitad de siglo XX que a un análisis social foucaltiano. La ilusión del uso de Facebook como dispositivo de control es casi un slogan de marketing que apunta tan solo a explotar el verdadero poderío de Facebook como medio de publicidad. Sin embargo considero que su poder como productor de individualismo es mucho menor que el encontrado en su competidor en vías de quedar obsoleto llamado televisión.
    Los datos expuestos en Facebook son generalmente de caracter estético y facilista, no representando en general el tan deseado perfil de consumidor, el cual es mucho más simple y fácil de obtener accediendo a bases bancarias y de tarjetas de crédito. En Facebook unirse al club de fans de las pastilla M&M no significa más que un vínculo estético con un producto que probablemente ni siquiera sea de consumo habitual hoy día para quien lo elige. El excesivo intercambio de información completamente irrelevante entre los amigos virtuales hace práctimamente imposible realizar un algoritmo que separe la paja del trigo, por lo que tampoco es viable una extracción de datos útiles en este sentido por más información importante que los miembros intercambien entre sí de manera pública.
    Facebook sí es un lugar de alta exposición para movidas publicitarias pseudo-personalizadas al estilo Google y tal vez una posible fuente de extracción de datos para estrategias masivas y cuasi-ilegales como el spam.
    No considero que sea un dispositivo generador de individualismo como la telivisión debido a que la mayor característica a esto asociada de la segunda es la pasividad del usuario, algo bastante revertido en el mundo de internet. Y aunque los efectos del individualismo sí puedan verse en muchos comportamientos actuales tanto dentro como fuera de la red, considero a Facebook como un "no-lugar" pero completamente relacional y anticompetitivo, al menos no competitivo en el sentido de la competencia individualizadora que se da en el ejemplo de la modulación de sueldos en algunos ámbitos laborales. En Facebook se comparte más información de la que se escatima, y la tendencia es a sentirse identificado con el otro aunque más no sea por compartir la fantasía del algún absurdo club de fans.

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  2. Revisando muy por arriba encontramos en Facebook 5 grupos de discusión creados en torno a Foucault y un par de grupos de fans. Teniendo en cuenta que con su noción de dispositivo, Foucault ya no piensa en la posibilidad de un poder exterior ni unidireccional. Es decir, que ya no se ubica en un lugar de represión general sino en una red de relaciones inmanentes, ¿qué pasa con el pensamiento sobre Facebook dentro de Facebook?

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  3. desconozco bastante de lo que se trata Facebook, sin embargo puedo aventurar dos cuestiones: primero (y con mis escasos conocimientos sobre la lengua inglesa) es un dispositivo que intenta adjudicar/localizar una imagen a un ser y determinarlo por ello, cosa que se repite en el DNI, las tarjetas de crédito, etc, etc...
    segundo, es un dispositivo que controla lo controlado, es decir, sólo está expuesto aquel que no expone nada, y si realmente se expone, sólo reafirma que los dispositivos sirven unicamente para quienes aún creen en un Dios vivo.
    por ahora ná más, un saludo. Julián
    ahh, otra cosa, el que el nombre este en ingles me dice algo más, pero no lo llego...

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  4. El ultimo qué fumaste?

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